Existe una alternativa que ha demostrado aumentar la productividad, sin dejar de lado la felicidad, y ese camino se llama FLOW.
FLOW es un estado en el que el tiempo parece desaparecer cuando las personas se enfocan en una actividad que les apasiona. Quienes conectan con su FLOW reducen su estrés y aumentan su productividad, además todos podemos experimentar este estado.
En Central W te compartimos algunos ejemplos de por qué el FLOW es la nueva era:
- En este proceso ocurre una bomba energética cerebral. Se unen los cinco químicos más potentes y se eleva la creatividad hasta siete veces.
- John Boyne, autor del libro «El niño de la pijama de rayas», uso este método para escribirlo. pues en tan solo dos días y medio logró terminar la famosa obra literaria.
- El Estado de Flow se siente de manera placentera y liberadora, ya que nos vemos inmersos en una actividad que estimula nuestras pasiones, curiosidades, intereses y nuestros sentidos. Perdemos la noción del tiempo y se produce un estado de creatividad y productividad muy elevado.
- La atención se centra en la tarea y experimentas un alto grado de concentración
- La actividad es intrínsecamente gratificante
- Existe un sentimiento placentero relacionado con lo que estás haciendo
- Te pierdes en el tiempo
- La tarea se percibe como realizable y piensas que eres competente para llevarla a cabo
- Notas que tienes control sobre el esfuerzo que realizas.
- Desaparece la sensación de fatiga
- El estado de conciencia es casi automático, no requiere esfuerzo
El Estado de Flow (o Estado de Fluidez) ocurre cuando estamos tan inmersos en una actividad que parece que el que el tiempo vuela y disfrutamos del placer de cada segundo que pasa. Si alguna vez has experimentado el Estado de Flow, habrás notado que estás tan concentrado o concentrada en aquello que estás haciendo, que te olvidas de lo que ocurre a tu alrededor y no deseas que ese instante acabe.
El término Fluir (flow en inglés) es introducido por Mihály Csikszentmiháyi y se relaciona con la creatividad, el talento y la felicidad, y es uno de los pilares básicos de la psicología positiva. Para Mihaly Csikszentmihalyi (2009),